El esperado informe económico de los administradores por fin ha visto la luz. Lo hizo ayer en el Juzgado de lo Mercantil número uno de Cádiz donde se pudo comprobar que el número de acreedores que posee el Deportivo a día de hoy asciende a 212 y sitúa la cantidad total reconocida en 26.066.633’56 euros. Morales finaliza su etapa (al menos hasta que el club entró en concurso de acreedores) duplicando la deuda, pues hay que recordar que el nazareno cuando llegó a la entidad, el pasivo del club rondaba los 12 millones de euros. Todo ello pese a la precariedad en el presupuesto de la pasada temporada en su paso por Primera División. Las cifras distan en varios millones de lo que pen
saba Javier Tebas, abogado del concurso de acreedores del club, que a finales del pasado año hablaba de 19 millones de deuda neta y 22 de deuda bruta. De cualquier forma, las cantidades no son definitivas, toda vez que el club aún debe recibir ingresos referentes al contrato de televisión de la pasada campaña y que por el ‘affaire’ con Mediapro han quedado en el aire.El mayor acreedor del Xerez sigue siendo la empresa de Francisco Garrido, Garrido Edificaciones, con un total de 2.176.950 euros; seguido de la Tesorería General de la Seguridad Social con 871.604 euros; y FREMAP, con 628.266 euros. Otras cantidades reseñables son las que se le deben a Esteban Vigo, 203.517 euros; o las que el club tiene pendientes con el Villarreal por la cesión de Jozy Altidore, 174.000 euros.De la etapa más reciente aparece la totalidad de la plantilla del ascenso (incluidos utilleros y fisios) a la que se le adeuda la prima prometida por Morales, además de cantidades a Leandro Gioda, Cuco Ziganda, Fabián Orellana, Vigneri o Alustiza. También de la etapa de Morales y Monterrubio son las deudas con Benjamín, Álex Colorado, Gustavo Pinedo o Antonio Puche. Lo más sangrante, no obstante son las deudas pendientes con jugadores de temporadas como la 99/2000, Sergio Tinajero, o la 01/02, como el delantero croata Mario Coric. Asimismo, existen deudas con clubes como Villarreal, Sevilla, Valladolid y Real Mallorca.Los acreedores y el club (la concursada) tienen ahora diez días para reclamar cantidades antes de que la jueza dicte sentencia. Los siguientes pasos serían redactar un informe definitivo y que la jueza Nuria Orellana eleve la propuesta de un convenio con los propios acreedores (serían los ordinarios los que pueden votar) en el que se negociarían diferentes quitas y un abono de dichas cantidades en un determinado número de años.
saba Javier Tebas, abogado del concurso de acreedores del club, que a finales del pasado año hablaba de 19 millones de deuda neta y 22 de deuda bruta. De cualquier forma, las cantidades no son definitivas, toda vez que el club aún debe recibir ingresos referentes al contrato de televisión de la pasada campaña y que por el ‘affaire’ con Mediapro han quedado en el aire.El mayor acreedor del Xerez sigue siendo la empresa de Francisco Garrido, Garrido Edificaciones, con un total de 2.176.950 euros; seguido de la Tesorería General de la Seguridad Social con 871.604 euros; y FREMAP, con 628.266 euros. Otras cantidades reseñables son las que se le deben a Esteban Vigo, 203.517 euros; o las que el club tiene pendientes con el Villarreal por la cesión de Jozy Altidore, 174.000 euros.De la etapa más reciente aparece la totalidad de la plantilla del ascenso (incluidos utilleros y fisios) a la que se le adeuda la prima prometida por Morales, además de cantidades a Leandro Gioda, Cuco Ziganda, Fabián Orellana, Vigneri o Alustiza. También de la etapa de Morales y Monterrubio son las deudas con Benjamín, Álex Colorado, Gustavo Pinedo o Antonio Puche. Lo más sangrante, no obstante son las deudas pendientes con jugadores de temporadas como la 99/2000, Sergio Tinajero, o la 01/02, como el delantero croata Mario Coric. Asimismo, existen deudas con clubes como Villarreal, Sevilla, Valladolid y Real Mallorca.Los acreedores y el club (la concursada) tienen ahora diez días para reclamar cantidades antes de que la jueza dicte sentencia. Los siguientes pasos serían redactar un informe definitivo y que la jueza Nuria Orellana eleve la propuesta de un convenio con los propios acreedores (serían los ordinarios los que pueden votar) en el que se negociarían diferentes quitas y un abono de dichas cantidades en un determinado número de años. 
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